¿Un boxeador transgénero? La conmovedora historia de Thomas Page McBee
Nació con el cuerpo de una mujer, pero 27 años después, logró convertirse en lo que siempre quiso. Tras muchas batallas –tanto físicas, como mentales-, Thomas Page McBee se transformó en un boxeador transgénero, que además de luchar en el ring, escribe literatura y comparte su experiencia con el mundo, porque “para nadie es fácil nacer en el cuerpo equivocado”. ¿Qué lo motivó a cambiar? ¿Qué lo inspiró a pelear? Aquí te contamos todo.
Un niño encerrado en el cuerpo de una niña
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Los transexuales suelen tener una frase en común “nací en el cuerpo equivocado”, pero esa es la realidad de Thomas Page McBee, quien desde muy pequeño, sabía que lo que veía en el espejo, no concordaba con lo que sentía.
Cuando era niña, solían calificarlo como “marimacho”, o poco femenino. Su vida estuvo sometida a las torturas de su padrastro, quien lo humillaba y maltrataba constantemente. Además de tener que luchar con su propia identidad, Thomas debía enfrentarse a un ‘monstruo’ que en casa, lo acechaba diariamente.
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Le tocó invertir miles de dólares, someterse a más de tres cirugías y depender de por vida de una inyección de testosterona, para poder pararse frente al espejo y sentirse conforme con lo que ve. Su transición se completó en el 2012, 31 años después de su nacimiento.
El boxeo le enseñó lo que significa una identidad ‘masculina’
Se inscribió en un gimnasio de boxeo, con el propósito de entender la masculinidad desde el punto de vista de la violencia. Le costaba comprender por qué los hombres recurrían a lo físico antes de lo emocional, y para poder transformarse en uno, debía adaptarse a lo que la sociedad entiende como ‘masculino’.
“Cuando cambié de sexo tuve que aprender a ser un hombre, y aunque entonces me sentí mucho más en armonía con mi cuerpo, no estaba conforme con una sociedad que solo aceptaba una manera de serlo”
Thomas, explica que la sociedad está extremadamente acostumbrada a un ‘tipo de hombre’ particular. Que tiende a ser rudo, fuerte y que no debe mostrar sus sentimientos, pero él insiste en que la masculinidad se ha convertido en una especie de castigo para los sentimientos del hombre. “Lo tóxico no es la masculinidad, sino la manera en que se enseña a serlo”
¿Qué es la masculinidad? Hay que crear ‘mas modelos de hombre’
Al comenzar su proceso de transición, Thomas debió aprender lo que significaba realmente ser un hombre, con todos los preceptos que tiene la sociedad al respecto. En su libro “Un hombre de verdad”, aborda desde su punto de vista, cómo los hombres tienen ‘prohibido’ sentir o mostrarse vulnerables.
“En Estados Unidos se educa al niño para ser hombre y lo tóxico no es la masculinidad, sino la manera en que se enseña a serlo. Por ejemplo, enseñar a esconder los sentimientos, a dominar, a no estar conectado con la empatía(…)Tenemos que crear más modelos de masculinidad, más opciones de ser hombre”.
Thomas explica en su libro, cómo la sociedad aísla al hombre de los sentimientos, lo analiza desde el punto de vista del boxeador y concluye que incluso, el hombre se aleja completamente de la necesidad de contacto físico por los parámetros de la sociedad.
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“Los hombres son menos tocadores que las mujeres y les cuesta más decir que se sienten solos. Yo lo sé por mi experiencia, mi transformación. Ahora la gente me toca menos. Y la soledad encamina al suicidio, y puedo decir que los hombres experimentan más la soledad que las mujeres”, declaró en una entrevista a El País.
La importancia de tener un aliado
Ahora, Thomas está felizmente casado y es legalmente un hombre.
Su transición no fue sencilla. Thomas debió pasar no solamente por los maltratos de su padrastro, el rechazo de la sociedad e incluso, su propia depresión y ansiedad, sino que también perdió a su madre por culpa del alcoholismo.
Para poder lidiar con todas estas batallas emocionales, se refugió en la literatura y en el boxeo.
La literatura “es el gran regalo, permite estar en la mente de otra persona y desencadenar lo que siente, vivir en otras emociones. La literatura me hace sentir parte de la familia humana y saber que no hay nada de mí que sea igual en otro”, explicó.
Y el boxeo, lo ayudó a entender cuál era verdaderamente su identidad masculina. “Gracias al boxeo conozco mis fortalezas y mis debilidades. Mi cuerpo no es perfecto, pero lo siento mío. En un ring la violencia es consensuada, no pegas a alguien que no quiere estar involucrado ni que es más débil. Es una decisión conjunta”, declaró.
Thomas además de ser boxeador y escritor amateur, trabaja como periodista colaborador en medios como The New York Times, Playboy, entre otros medios. Trabaja también recorre Estados Unidos dando charlas sobre su condición a la comunidad LGBT.
Por Mary Villarroel Sneshko | @Vivodesorpresas | Culturizando
Con información de ElPaísSemanal|Planeta de Libros
Fotos por: Erik Tanner.
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