Trabajo 2025: Cuáles serán las habilidades blandas más requeridas y cómo tenerlas
Por Daniel Colombo | Es una realidad que ya estamos viviendo en todo tipo de actividades: el trabajo necesita, hoy, distintas habilidades a las de hace apenas diez años.
De la mano de la tecnología, la robótica, la inteligencia artificial y los avances en lo científico, vemos como se modifican drásticamente las skills de los trabajadores, según ha estimado el Word Economic Forum. Para el 2025 hay un consenso en señalar que al menos un 50% de las tareas que hoy se realizan con personas podrán ser realizadas por tecnología.
Como consecuencia, más allá del nacimiento de nuevos empleos relacionados con aspectos muy específicos de cada industria, ya tenemos conviviendo generaciones de colaboradores que son 100% digitales, y en muchos casos con espacios virtuales, ejerciendo su labor a distancia y basados en la nube, el espacio virtual de almacenamiento y circulación de datos.
Las habilidades blandas surgen de la necesidad de potenciar funciones cerebrales que, típicamente, están asociadas con el hemisferio derecho, como la comunicación, compasión, solidaridad, empatía, creatividad, innovación, amor y sentimientos. En el izquierdo encontramos los dominios del universo más lógico: cálculos, estrategia, planeación, razonamiento.
Hasta hace dos décadas se privilegiaba lo mental y racional por sobre lo emocional; hoy es necesaria esta integración para lograr la máxima efectividad personal y profesional.
Hay cosas que una máquina no puede aprender (por ahora)
La mayoría de los diez trabajos más requeridos en el mundo de hoy tienen que ver con tecnología y el cuidado del medio-ambiente, otro aspecto a integrar. Este es un campo que indudablemente se seguirá fortaleciendo en todos los entornos, inclusive llegará e impactará en pequeñas poblaciones que -hasta ahora- han vivido atrasadas al respecto, y donde la forma manual integrará maquinarias y dispositivos que harán las tareas más rápido y sin tantos errores como cuando lo hacemos los humanos.
¿Significa esto que tendremos legiones de personas sin empleo? No si nos preparamos adecuadamente.
Las habilidades blandas “humanas” no pueden ser emuladas por una máquina o un robot, por el momento. De allí que el 50% de las competencias que hoy se buscan en las empresas y organizaciones de cualquier tipo tienen que ver con estas destrezas específicas. La otra mitad es el conocimiento técnico en la tarea. Queda, entonces, una gran oportunidad para las empresas y el sector de la educación para entrenar las soft skills además del conocimiento profesional en cada ámbito si se quiere promover una mejor inserción laboral.
Y aquí sí es conveniente advertir que quienes no las desarrollen e implanten lo suficiente en su desempeño desde ahora mismo, es posible que no encuentren más su lugar de desempeño: es imperioso integrarlas para no padecer del efecto de aislamiento en un entorno laboral totalmente cambiante.
Las 5 habilidades blandas indispensables
En las empresas actuales, se valoran al menos cinco aspectos que cada persona puede entrenar y desarrollar. De hecho, por mi labor como coach empresarial en distintos países, son muchas las que las integran en sus programas anuales de capacitación.
Para entender este contexto, cuando te capacitas en habilidades blandas estarás mejorando tu desempeño laboral, y, fundamentalmente, personal. Este efecto de doble vía es sumamente virtuoso a la hora de establecer programas de entrenamiento para los colaboradores, ya que estimula un mayor bienestar y felicidad en el trabajo.
-
Toma de decisiones y negociación
Se buscan y potencian colaboradores con capacidad analítica y de gestión emocional para la toma de decisiones en sus tareas cotidianas; esto implica un cambio en el antiguo paradigma en muchas compañías donde “el jefe manda y el empleado obedece”. Entrenamientos sugeridos: negociación, mediación, comunicación, cambio de roles de liderazgo.
-
Comunicación asertiva
Para cualquier posición es imperioso contar con competencias de comunicación avanzada, no sólo con sus compañeros de trabajo y líderes, sino con los distintos públicos -clientes, accionistas, proveedores-. La escucha activa, la empatía, la paciencia, la oratoria y hacer presentaciones públicas y ser asertivos son parte de los aspectos a entrenar. Para capacitarse: programas sobre trabajo en equipo, dinámicas participativas, feedback y feedforward (la retroalimentación del futuro), neurociencias aplicadas y coaching empresarial.
-
Gestión de emociones
Todavía recuerdo hace 20 años cuando brindé mi primera capacitación en una empresa sobre este tema: por entonces prácticamente estaba prohibido hablar de cómo nos sentimos, cómo vivimos las situaciones y cómo pensamos en el entorno laboral. La gestión de emociones incluye el equilibrio que cada persona puede alcanzar para auto regular sus respuestas ante los estímulos, desafíos y problemas. Disminuyen los miedos, aumenta la confianza y el espíritu colaborativo. De la capacidad adaptativa dependerá su éxito en la gestión de su trabajo. Daniel Goleman, el impulsor de la inteligencia emocional, estima que entre el 70% y 80% del éxito en las personas adultas radica de su habilidad de gestión de emociones. Para entrenarse: gestión emocional, auto conocimiento, mejora de la auto estima, meditación, ejercitación física consciente y mindfulness.
-
Liderazgo y trabajo en equipo
Para el trabajo de hoy y del futuro es necesario el empoderamiento de cada colaborador, a través de la motivación y las destrezas necesarias para gestionar lo que le compete, y, a la vez, llevar adelante la conducción de equipos, y formar parte de estos. Este estilo de liderazgo colaborativo, donde todos participan en las decisiones, es una dinámica completamente diferente a lo conocido hasta ahora. Por eso tanto líderes como colaboradores, y la cultura empresarial en su totalidad, necesitan adaptarse e incorporar estas habilidades. Aquí son necesarios programas de formación de líderes de todos los niveles, comunicación efectiva, dinámicas y conducción de equipos, planificación, productividad y gestión del tiempo. También teambuilding, diálogos apreciativos, pensamiento crítico (Critical Thinking) y el fomento de participación en causas de interés público.
-
Desarrollo personal a medida
A la par de las destrezas que pueden ser trabajadas en conjunto en todo un equipo, está el desarrollo personal diseñado especialmente para cada colaborador. Las empresas han empezado a focalizarse en la necesidad del aprendizaje constante de habilidades blandas, y en muchos casos, hacen foco en algunas en particular para ciertos colaboradores. Metodologías ágiles que contemplen el universo emocional (no simplemente la aceleración de la ejecución), espacios de reflexión, coaching empresarial y formaciones alternativas a lo duro de cualquier industria, empiezan a formar parte de las propuestas de entrenamiento pensadas uno a uno, además de todo el equipo. Para incorporar estas habilidades blandas: seminarios de desarrollo personal, espacios de coaching ejecutivo focalizado en desarrollo personal y de carrera, plan de desarrollo basado en intereses personales, voluntariado y acciones de responsabilidad social que impliquen la sensibilización e involucramiento de la persona.
Foto: Shutterstock
- Me gusta 0
- Me encanta 2
- Me divierte 0
- Me asombra 0
- Me entristece 0
- Me enoja 1