Octubre 29, 2016

Payasos macabros, la ‘nueva moda’ de mal gusto

Payasos macabros, la 'nueva moda' de mal gusto

Ya no es gracioso. Desde la aparición del primer payaso diabólico hasta ahora, la lista de heridos, detenidos y denuncias ha ido en aumento.

Los que personifican a estos payasos normalmente actúan en la noche en parques, zonas arboladas, cementerios y cerca de escuelas, en donde aparecen de forma intempestiva para asustar a los transeúntes y conductores, sin medir la edad o el género.

Su vestimenta suele consistir en trajes y zapatos coloridos con máscaras de horror, con cara desfigurada o expresión temible. El modus operandi puede ir desde simular un secuestro, perseguir a alguien con un mazo, motosierra, hacha o navaja, hasta golpear el capó de un carro con algún objeto grande.

Esta moda “comenzó” en agosto en Estados Unidos, específicamente en Green Bay, Wisconsin, con un payaso que tenía globos negros, pero resultó ser la promoción de un cortometraje de terror llamado ‘Gags’, del director Adam Krause.

La tendencia se ha expandido por el mundo, principalmente en Canadá, México y el norte de Europa, de Austria a Suecia, pasando por Noruega y Dinamarca.

@ClownSightings, en Twitter, ha compartido decenas de videos, fotos, memes de EE.UU. y otras partes del mundo, y ya cuenta con más de 340 mil seguidores.

Consecuencias

Un hombre disparó su rifle AR-15, en Bardstown, Kentucky, EE.UU., por la advertencia de su esposa que aseguraba haber visto uno de los payasos en medio de la noche. Resultó ser una mujer que había sacado a pasear a su perro. Afortunadamente el esposo falló y no le causó ningún daño a la transeúnte.

En el mismo país, una niña de 11 años fue detenida por llevar un cuchillo a su escuela y cuando le preguntaron por qué lo había hecho, ella respondió que era para defenderse de los payasos que había leído en redes sociales.

Otro caso tuvo lugar en Manhattan, cuando un payaso armado con un cuchillo les impidió a los pasajeros salir de una estación en Upper East Side. Uno de los joven intentó esquivarlo y el falso clown lo persiguió mostrándole el arma.

Connor Jones, de 18 años, fue detenido y obligado a pagar 110 dólares en Reino Unido por asustar a niños a la salida de una escuela en Gales del Sur. Tras ser liberado, se burló de la multa a través de las redes sociales: “Sólo tuve que pagar 90 libras por mis travesuras como payaso, jaja”.

En Berlín, Alemania, un adolescente de 16 años fue acuchillado por otro menor, de 14 años, por haber intentado asustarlo disfrazado de payaso diabólico. El más joven intentó defenderse y el herido tuvo que ser operado de urgencia porque se temía por su vida.

Al oeste de ese país, en Aquisgrán, un joven ciclista resultó herido al caer de su bicicleta tras ser asustado por un payaso que saltó de entre unos arbustos.

En la localidad danesa de Frederiksværk, al norte de Copenhague, otro payaso siniestro provocó un accidente al asustar al conductor de un auto, pero resultó ileso.

Suecia tuvo un episodio grave en Varberg, cuando un hombre disfrazado de payaso apuñaló sin mediar palabra a un joven provocándole heridas leves en un hombro. El agresor se fugó.

En México -específicamente en Mexicali, Baja California- un adolescente de 15 años fue procesado por porte ilegal de arma después de que lo detuvieran porque andaba asustando con una máscara de payaso y un hacha real.

Varios delincuentes en Monterrey y Nuevo León han utilizado la vestimenta de payasos –aprovechando el auge- para cometer sus fechorías.

Una moda que se repite

En 1981, 1991 y 1997 también hubo una oleada de avistamientos de payasos en Estados Unidos y todas ocurrieron pocos meses antes de Halloween.

DM Pranks, creado por Matteo Moroni, es un canal de YouTube que lleva desde 2013 haciendo este tipo de bromas pero de una forma más segura.

Moroni, que también se ha disfrazado de alien y zombie, cuenta con un equipo que luego le informa a la víctima que se trataba de una broma. Una de las máscaras utilizadas por ellos es la de Pennywise, el payaso de la película It.

John Wayne Gacy fue un asesino en serie estadounidense que violó y mató a 33 jóvenes entre 1972 y 1978. Se le llamó «El payaso asesino» porque hacía servicios sociales en desfiles y fiestas de niños vestido de payaso, haciéndose llamar «Pogo The Clown», personaje que él mismo creó.

La ley responde

Por una nueva normativa en Eslovenia, ocho payasos diabólicos fueron multados con 104 y 250 euros. La policía del país indicó en televisión pública que la regla permite sancionar a quien cause miedo o lance amenazas a la ciudadanía.

El portavoz de la policía de Liubliana –capital de Eslovenia-, Drago Menegalija, explicó que «disfrazarse de payaso de por sí no es una infracción o un acto penal, pero cuando éste causa a los ciudadanos miedo, inquietud o los humilla, y especialmente si amenaza con objetos peligrosos, una persona que actúa así puede ser sancionada por violar la paz pública».

Los organismos de seguridad del mundo también condenan el empleo de la violencia contra los payasos diabólicos y advierten que en muchos casos se trata de niños y adolescentes que no son del todo conscientes del daño que pueden causar.

Josh Earnest, vocero de la Casa Blanca, afirmó que las autoridades locales deben tomar con seriedad este tipo de bromas y actuar “si perciben amenazas a la seguridad de la comunidad”.

La Policía berlinesa informó que los payasos que asustan a otras personas pueden ser condenados a hasta un año de cárcel y recordó que los agredidos tienen derecho a defenderse de un ataque «pero deben también mantener la proporción». Además abogaron para que no utilizaran ese disfraz el próximo lunes –Halloween- para evitar malentendidos.

Batman al rescate

Cuando la “moda” llegó a Cumbria, Inglaterra, un hombre disfrazado de Batman decidió cazar a los “bromistas”.

Una tienda de disfraces en el municipio Whitehaven, Cumbria Superheroes, reconoció ser la que envió al justiciero de Gotham a perseguir a los maleantes porque muchos niños de la zona estaban traumatizados con los hombres disfrazados que rondaban por el pueblo.

BBC Cumbria compartió las imágenes en su Facebook.

 

¿Y por qué les tenemos miedo a los payasos?

La coulrofobia es el miedo irracional a los payasos y a los mimos.

El profesor Mark Griffiths, psicólogo de la Universidad de Nottingham Trent, dice que los payasos tienden a dar miedo por su apariencia exagerada y su representación del mal en películas. «Hay un estereotipo del payaso desagradable, malvado, misterioso. Si nos fijamos en los payasos lo que tendemos a encontrar es que parte de su cara o pies son exagerados, enormes narices, bocas de miedo y cabello exorbitante».

Los payasos están relacionados con la creepiness, que se puede definir como la ansiedad que causa la ambigüedad de si algo supone o no una amenaza y la dificultad de precisar qué tipo de riesgo podría implicar.

La situación se ha salido de control al punto que el grupo de payasos Ali Ghan Shrines Club decidió cancelar su participación en un desfile en Hagerstown (Maryland) el 29 de octubre, porque no pretenden asustar, sino hacer reír a los niños  y recaudar dinero para hospitales.

Diego Mata / culturizando.com
Con información de 20 minutos, Excelsior, Verne El PAÍS, Cultura Ocio, Republica, El Comercio, BBC, Telesur, El Confidencial, Info News | Foto: Payaso Macabro / Shutterstock

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