Mitos comunes y conceptos erróneos sobre el cannabis 

En todo el mundo, los legisladores están cambiando las reglas sobre el cannabis. Pasó de estar prohibido en casi todas partes, a usarse comúnmente con fines médicos y recreativos. Sin embargo, todavía existe mucha desinformación. Por esta razón, queremos aclarar los mitos y conceptos erróneos más comunes sobre esta planta y sus derivados.  

Hoy en día, estamos mejor informados que nunca sobre el cannabis gracias a recursos en línea como Cannaconnection. Sin embargo, existen algunos mitos y conceptos erróneos que se niegan a desaparecer. Se trata de opiniones populares que se transmiten de boca en boca, pero muchas tienen que ver con ideas preconcebidas.   

La prohibición del cannabis protege a los niños  

En 2011, el consumo de cannabis en adolescentes estadounidenses alcanzó su auge en más de 30 años. Las cifras arrojaban que uno de cada 15 estudiantes de secundaria fumaba la mayor parte de los días. Los adolescentes de este país admitían fumar más cannabis que tabaco.  

Sin embargo, se demostró que los adolescentes no fumaban más cannabis en estados donde la marihuana medicinal es legal, que en los que es ilegal. Esto implica que la prohibición del cannabis no frena su consumo, ni su legalización lo promueve.  

El uso de marihuana produce cáncer  

El hecho de fumar cualquier tipo de sustancia bien sea cannabis o tabaco, produce humo que contiene carcinógenos. Sin embargo, la cantidad de cannabis que consume un fumador habitual no contiene la suficiente concentración de toxinas como para causar cáncer. Siempre que el cannabis sea 100% puro y de buena calidad, el consumidor no tendrá que exponerse a la misma cantidad de agentes cancerígenos que con el tabaco. 

Asimismo, recordemos que fumar cannabis no es la única forma de consumirlo. Existen alternativas mucho más seguras y saludables como a través de suplementos alimenticios, aceites de cocina, infusiones, etc.  

El consumo de marihuana induce el crimen y la delincuencia  

El índice de consumo de cannabis es más elevado entre delincuentes que no delincuentes. Sin embargo, su consumo no induce los delitos violentos. La causalidad de esta estadística se debe a que, a nivel general, los delincuentes son más propensos a consumir drogas.  

A diferencia del alcohol, los efectos de la marihuana no desencadenan agresión. Si bien es cierto que las dosis de tetrahidrocannabinol o THC son psicoactivas, generan un subidón de ánimo. Por otra parte, el componente de cannabidiol o CBD, induce un estado de relajación que combate la ansiedad y mejora la calidad del sueño.  

La marihuana causa dependencia y adicción  

Este mito es uno de los más populares, y la realidad es que el cannabis sí puede crear dependencia, pero la probabilidad es mucho menor respecto a otras drogas. Alrededor del 9% de consumidores de marihuana se han vuelto clínicamente dependientes en algún momento. Sin embargo, este porcentaje asciende al 15% si hablamos de los consumidores de cocaína y al 24% si hablamos de los consumidores de heroína.  

La marihuana es completamente inofensiva 

Depende de cómo consumas el cannabis, puede ser inofensivo o no. Si fumas cannabis, debes saber que el humo de esta planta es químicamente similar al del tabaco. De este modo, los fumadores intensos de cannabis corren el riesgo de sufrir las enfermedades respiratorias que genera el cigarrillo. Por esta razón, es recomendable buscar métodos de consumo más saludables.