“Si luchas con fe y honestidad por lo que deseas algún día seguro será tu realidad”

Christopher Barquero | Life Coach @ChrisBarquero |

Semanas atrás, compartí en mi Facebook el deseo por aumentar mi fe. Alguien me dijo entonces: “la fe no se puede aumentar, es como estar embarazada, estás o no. O tienes fe o no la tienes”.

Ah caray, me dejó pensando porque en algunas áreas de mi vida, me he entregado totalmente a la fe, sin embargo, en otras, soy tan humano que a veces dudo, pongo en tela de juicio cómo se resolverán mis deseos, quizás confío pero digamos que no con los ojos cerrados, sino que mantengo un ojo abierto. Lo cual no está bien, pues me crea frustración, miedo, temor, ansiedad por lo que será, por lo que viene, por si sucederá, por cómo se resolverán las cosas y le entrego muchas veces la energía a todo eso, en vez de concentrarme en disfrutar lo que estoy viviendo.

Como bien dice el libro mayor de todos los tiempos: “la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve”.  Y es un tema complicado y ni me diga que no, porque como seres humanos siempre queremos tener el control o garantía que las cosas sucederán como y cuando nosotros deseamos. Sin embargo, así no funciona este negocio llamado vida. De pronto algunas veces todo llega tal cual hemos planeado, en otras oportunidades nos lleva por otro camino para, antes de recibir, aprender. O bien, no sucede lo que deseamos pero recibimos algo mejor y superior a lo que esperamos. El chiste es que en medio de la espera, debemos tener fe, estar en paz y confiar. Sino todo será más complicado, y uno mismo es quien se complicado la vida, al desconectarse de la fe.

Joyce Meyer, escritora de cantidad de best-sellers, comenta en su libro Cómo formar buenos hábitos y romper malos hábitos, sobre la fe, lo siguiente: “todos tenemos fe, pero la clave del éxito es dónde la ponemos. Si pone su fe en usted mismo o en otras personas, quedará defraudado, pero si la pone en Dios, se sorprenderá de lo que Él puede hacer por medio de usted”.

Y es que la mayor de las veces, como diría Cantinflas, ahí está el detalle: ponemos la fe en donde o en quien no debemos, incluso cuando la fijamos en nosotros mismos, estamos perdidos porque, como humanos, le damos poder a los demás, o nos auto saboteamos, en vez de confiar y caminar paso por paso, sin necesidad de ver el camino completo.

Joyce asegura además, y no me cabe duda, que desarrollando el “hábito de la fe no dejará espacio para la preocupación. También expulsa el temor”.

Y es que claro,  cuando no tenemos fe, estamos más agarrados que una garrapata al miedo y al temor y eso, obviamente nos limita a recibir lo que la vida tiene para nosotros.

Hay muchas personas que no tienen fe, esto, debido a las situaciones que han vivido en el pasado y por estarnos lamentando del ayer, definitivamente podemos arruinar nuestro presente y futuro. Muchas son las personas que pueden dar fe, de ello.

Hace unos días, me compartieron un texto titulado Vuelve a empezar, en el que comentan que caerse no es nada, como sabemos lo importante es levantarse. Además, sabiamente mencionan que en la vida no dejaremos de enfrentar situaciones, sin embargo, todo lo podemos superar.

En una columna anterior, te compartía el sentimiento de que cada vez que recibimos un “no”, en vez de destruirnos o limitarnos, nos deben hacer ver que cada vez estamos más cerca del sí. Esa es una actitud de fe. Como dicen, las palabras se las puede llevar el viento, pero los hechos ni un huracán. Revisa qué tanto estás luchando o no por lo que deseas.

En el texto que les comentaba, venían algunos casos de grandes figuras que cambiaron el mundo con sus inventos o hicieron historia con su talento, porque nunca perdieron la fe y a pesar de todo y de todos, lo lograron, triunfaron.  Te comparto esos casos:

  -Intentó hacer cinco compañías de autos, y las cinco quebraron. Volvió a comenzar y fue un éxito. Se llamaba Henry Ford.

   -En sus comienzos fue despedido de un periódico porque «le faltaba imaginación y no tenia buenas ideas». Después de eso, comenzó una serie de empresas y terminó con la quiebra y el fracaso. Volvió a comenzar y fue un éxito. Se llamaba Walt Disney.

  -Un japonés llamado Akio Morita creó una olla para hacer arroz con la que quería ser millonario, peor fracasó rotundamente. Volvió a comenzar y creó la compañía SONY.

   -Muchas veces rechazado por el equipo de básquet de su escuela, el nunca se dio por vencido y una vez dijo: “He fallado más de 9.000 tiros en mi carrera, pedí 300 juegos, en 26 ocasiones me han confiado el tiro ganador y he fallado. Y es por todo eso que ahora tengo éxito, siempre volví a empezar” ¿Su nombre? Michael Jordan

   -Le rechazaron 1009 veces su receta. Le dijeron que jamás iba a resultar, que los americanos no comerían ese tipo de pollo frito. El Coronel Sanders no se dio por vencido y hoy KFC es una cadena multimillonaria.

   -No habló hasta que tenía cuatro años y no aprendió a leer hasta los siete años, sus maestros y sus padres pensaron que era deficiente mental, lento y antisocial. Finalmente, fue expulsado de la escuela y no fue admitido en la Escuela Politécnica de Zurich por retrasado. Pero Albert Einstein no se dio por vencido.

   -En sus primeros años, los maestros, dijeron que era «demasiado estúpido para aprender cualquier cosa.» El trabajo no era mejor, ya que fue despedido de sus primeros dos puestos de trabajo para no ser lo suficientemente productivo. Se llamaba Thomas Edison.

   -En su primera película, los ejecutivos de la industria del cine le dijeron que simplemente no tenía lo que se necesitaba para ser una estrella. Pero Harrison Ford no los escuchó.

   -Fue rechazado de la Universidad de California del Sur de Teatro, Cine y Televisión en tres ocasiones. Treinta y cinco años después de comenzar su título, volvió a la escuela en 2002 para completar finalmente sus estudios y obtener su licenciatura. Steven Spielberg volvió a comenzar.

   -Jimmy Denny, gerente del estudio de grabación mas grande, despidió al novato cantante después de audicionarlo y le dijo: “Muchacho, naciste para manejar un camión, jamás podrás cantar” Pero Elvis Presley no le hizo caso.

   -Otra compañía de discos, de las mas importantes, escuchó al grupo y dijo: “No nos gusta su sonido, y la música de la guitarra jamás va a gustarle al público » Ese día rechazó a Los Beatles.

   -Un muchacho presentó un plan de negocios a su profesor de la secundaria y este le dijo: “Está pasable, pero es ciencia ficción, esto jamás resultaría, es humanamente imposible llevarlo a cabo” y le puso una nota mala. El muchacho Fred Smith, no se dio por vencido, llevó el negocio a cabo y creó Fedex, un negocio de 6 billones anuales.

Cuando tenemos fe, no desperdiciamos nuestra energía y nuestro tiempo en la preocupación. No le damos poder a los demás ni a la situaciones para abandonar nuestra meta, simplemente re direccionamos el camino, creamos nuevas estrategias y avanzamos, porque tenemos claro que aunque no sabemos cómo y cuándo sucederá, pasará. Tampoco nos dejamos llevar por lo que dicen los demás. Nos pueden rechazar, decir que no, tirar la puerta una y otra vez que eso no nos derrotará, simplemente nos hace saber que estamos más cerca de lo que merecemos, de lo que la vida nos ha dicho será para nosotros. Es así como, por medio de la fe, podemos mantener la felicidad en el camino, sin afanarnos por llegar a la meta, porque sabemos que llegaremos.

Abandone el pasado, no se afane por el futuro y disfrute el presente. Todo llega, en su momento; todo. Como dijo San Agustín:  “la fe consiste en creer lo que no vemos, y la recompensa es ver lo que creemos”.

Y recuerda: ¡a sonreír, agradecer y abrazar tu vida!

¡Gracias por existir, compartir y estar!

Christopher Barquero | Twitter: @ChrisBarquero | Facebook: Chris Barquero | Instagram: @ChrisBarquero

Christopher Barquero es periodista, productor y conductor de televisión costarricense radicado en México. Trabaja para la cadena Televisa y es colaborador de CNN. También dirige su propia agencia de relaciones públicas y mercadeo. Christopher es Life Coach, dedicado a impartir sesiones de Life Coach, Coach Ejecutivo y Empresarial. Es ferviente seguidor de las filosofías para el desarrollo, crecimiento personal y espiritual del ser humano, así como todo lo relacionado con la inteligencia emocional, autoayuda, meditación, metafísica, alimentación, ejercicio, programación neurolingüística,  aplicación mental, kabbalah y yoga. Actualmente escribe su primer libro, una guía para el bienestar emocional, físico y espiritual.

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