‘Euphoria’: El fascinante retrato de una generación en crisis
‘Euphoria’ es una serie del 2019 enfocada en el género de drama adolescente, escrita por Sam Levinson y producida por HBO. Protagonizada por Zendaya y con la participación de nuevos y antiguos rostros de la televisión, ‘Euphoria’ no solo ha cautivado a su audiencia por la naturaleza de su narrativa, sino que ha retratado exhaustivamente las dificultades de la juventud, el sexo, las drogas y la identidad.
Euphoria, la adolescencia magistralmente filmada
Particularmente, la razón por la cual Euphoria se ha consolidado como uno de los mejores proyectos audiovisuales no solo del 2019, sino de HBO, consiste en que no concibió miedos al momento de arriesgarse a proyectar la soledad, la depresión, la ansiedad y la lucha con la que los adolescentes se enfrentan día a día en la actualidad.
«La serie no es una carta de amor a las drogas, es una advertencia. No puedes endulzar realidades como esta. Creo que los adolescentes ahora están más abiertos a hablar sobre la adicción a las drogas, la sexualidad y los problemas de salud mental. En la serie se refleja esta realidad» – Eric Dane, actor de la serie Euphoria.
Bien se enfrenten a las drogas, al desamor, al bullying o a la búsqueda exhaustiva por el descubrimiento de la identidad, Euphoria rinde honor a su nombre, al presentarle a la audiencia una magnífica puesta en escena extrasensorial, donde acompañamos a Rue, Jules, Kat, Maddy, Cassie y al resto de los personajes en sus correspondientes narrativas.
Euphoria y su impecable representación de la comunidad LGBTIQ+
Durante la última década, las mejores producciones dedicadas a llevar, a la pequeña o gran pantalla, personajes que visibilizan a la comunidad LGBTIQ+, corresponden a guionistas, directores o productores que se identifican dentro de ella.
Tal es el caso de Jill Soloway (Transparent, 2014); Ryan Murphy (Glee, 2009-2015), (American Horror Story, 2011-2020) y las Hermanas Wachowski (Sense8, 2015-2018), solo por mencionar algunos nombres.
No obstante, Euphoria fue creada por Sam Levinson, un director y guionista norteamericano, cisgénero y heterosexual, que comprendió la verdadera naturaleza de la ficción juvenil, aunado a la necesidad de llevar a la televisión una propuesta arriesgada, realista y empática, dirigida a una generación que pedía a gritos ser visibilizada.
En este sentido, Euphoria se trata de uno de los shows con mejor fluidez en el espectro de la sexualidad que se haya hecho dentro del género adolescente.
El conflicto de la identidad en Euphoria
Euphoria es, indudablemente, una serie que se ubica en su tiempo y espacio. Su narrativa viene acompañada con una comprensión generacional sobre aspectos que, hace diez años, habrían sido impensables proyectar en la pequeña o gran pantalla. Y es precisamente esa comprensión sobre la vida lo que hace al show tan extraordinario, tan creíble.
La serie nos presenta la realidad de un grupo de jóvenes que, a pesar de sus diferencias y conflictos, coinciden en la búsqueda de su identidad.
A lo largo de ocho episodios conocemos a Rue, una chica de 17 años irremediablemente absorta en los narcóticos, la ansiedad y la depresión; a Jules, una pixie transgénero encantadora, cuya libertad es prácticamente irresistible; a Kat, con reivindicaciones sobre la belleza y el poder de la confianza; y a un extraordinario elenco que no solo diversifica, sino plasma verídicamente las relaciones entre adolescentes que se enfrentan a sus propias realidades.
Jules, el personaje trans que todos hemos estado esperando
“Nunca he conocido a nadie como Jules” – Rue, interpretada por Zendaya.
La verdad es que nadie ha conocido a alguien como Jules. No al menos de la forma en que la modelo Hunter Schafer ha interpretado a la adorable chica nueva de quien Rue -y el resto de la audiencia- ha caído profundamente enamorada.
Para Rue, la figura de Jules no solo se traduce en un interés romántico, sino en aquello que le hace sentir igual -o mejor- que la eterna lista de narcóticos a los que estaba acostumbrada a consumir día tras día, ¿es el amor una nueva droga para Rue? ¿O simplemente lo que le ha hecho percatarse de que existen mejores sensaciones que un estimulante sin prescripción?
La energía y el encanto de Jules, bien se encuentre recitando a Shakespeare en una piscina bajo los efectos del alcohol, o conduciendo su bicicleta iluminada por los tenues faroles suburbanos, supone una visión extraordinaria con respecto a la naturaleza del personaje.
Jules es trans y está orgullosa de serlo. Rue está enamorada de ella y nadie parece tomarlo como una sorpresa.
El rompimiento de los esquemas heteronormativos trasciende de una inclusión forzada y fuera de contexto, y sitúa a Jules como un verdadero ícono de la comunidad LGBTIQ+, que irradia colores neón, purpurina y sensualidad en todos sus aspectos.
¿Cuál es el encanto de Euphoria?
Euphoria es una serie juvenil observada desde una perspectiva adulta. Es precisamente esa visión lo que la distingue de otros shows exitosos en su género, pero que, particularmente, quedan en el olvido tras un par de temporadas.
«Puede que no sea la historia de todos los adolescentes, pero es una historia que no se ha contado así en mucho tiempo» – Tim Goodman, crítico para The Hollywood Reporter.
Es importante recalcar que Euphoria es la primera propuesta dentro del género adolescente de HBO. La introducción de este tipo de historias a la productora quizás se deba al auge y a la popularidad que han alcanzado otros proyectos como Riverdale o 13 Reasons Why, ambos distribuidos por la plataforma contrincante, Netflix.
Producida por el rapero canadiense Drake, entre otras figuras de la cultura pop occidental, la serie conquista a un público que hasta el momento había sido inexplorado, una generación que está dispuesta ver sus conflictos visibilizados en la pantalla y percatarse de que, a pesar de todo, no están solos.
Con información de: El País / El Mundo / Indie Wire / Fuera de Series
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