Marzo 03, 2021

Bienestar: balance entre dieta y emociones

De un punto al otro | Como personas humanas nuestro bienestar está relacionado con la armonía o balance entre el cuerpo y la mente. Una alimentación consciente, así como un buen manejo de nuestras emociones, son clave para nuestro bienestar. Y el estar bien se ve reflejado en todos los aspectos de la vida.

Entendiendo la palabra dieta como todo lo que se ingiere para alimentarse, junto al Dr. Stephane Decrock (experto en salud física integral y preventiva) MaVi y Daniel fueron ‘De un punto al otro’ para aclarar conceptos y juntos reflexionar sobre la importancia que tiene, no solo nuestra alimentación, sino la manera en la que manejamos nuestras emociones y nuestro estilo de vida, en el bienestar integral de las personas.

Los seres humanos somos más que el cuerpo, también tenemos un espíritu, nuestra alma racional, donde se gestan las emociones. Es el alma la que mueve nuestra voluntad y nos hace tomar las desiciones de vida. Es por eso que, si deseamos tener una vida realmente sana, no debemos dejar de lado ninguno de los aspectos que conforman nuestro ser.

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Tips para tener una vida sana

Consumir frutas y verduras

Un metaanálisis de 18 diferentes estudios demostró que por cada 100 gramos de fruta o verdura consumidos se reduce un 3% el riesgo de sufrir depresión.
Contienen polifenoles que contribuyen a prevenir enfermedades y a mantener el correcto funcionamiento de nuestros cuerpos

Evita el sedentarismo

Hacer ejercicios no solo te ayuda a bajar de peso, está demostrado científicamente que estar físicamente activo reduce el riesgo de padecer cáncer de colon, útero y mama.
La actividad física y el ejercicio son eficaces en la prevención de la depresión en los jóvenes.
El ejercicio relaja la mente, promueve la producción de los glóbulos rojos, lo cual ayuda a que el oxígeno fluya en el cerebro. Ayuda a mejorar la memoria, creatividad, y también la parte emocional.

Dormir (lo necesario)

Dormir poco o dormir demasiado puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas, diabetes y obesidad.
Un adulto sano necesita dormir de noche entre seis y nueve horas cada día.
Se ha demostrado que falta de sueño puede provocar un ansia desmedida por comer alimentos hipercalóricos.
Pescado, lácteos, lenteja, tófu, nueces y el kiwi son algunos de los alimentos que pueden ayudar a dormir mejor.

Reduce el tiempo dedicado a los aparatos electrónicos

El síndrome del túnel carpiano, la rizartrosis, la tendinitis de De Quervain, el dedo en resorte, la lesión del nervio cubital y dolor cervical son algunas de las enfermedades que resultan del largo tiempo que pasamos utilizando aparatos electrónicos.
Jugar a videojuegos de manera compulsiva puede reducir la sensibilidad al dolor.
La luz azul que emiten las pantallas, al igual que la luz del sol, reduce la producción de melatonina, esto causa insomnio y disminuye el estado de alerta a la mañana siguiente.
Evita mirar la pantalla en la oscuridad.
Mejora el contraste de la pantalla para evitar forzar la vista.
Descansar la mirada viendo a un punto lejano cuando notes cansancio en los ojos.

Cuida tu lado emocional

Mantener una actitud optimista, tener esperanza y sentirse más feliz ayuda a que podamos dominar el estrés y las situaciones adversas.
Cuando tenemos emociones positivas también percibimos menos dolor y otras discapacidades relacionadas con enfermedades crónicas.
Escuchar continuamente la música que te gusta contribuye a que tener emociones más intensas y positivas.
El orden la las sensación de que todo en la vida está organizado y funciona, esto fomenta el bienestar emocional.
Las emociones son inevitables, no se pueden controlar, pero sí es posible reconducirlas para que nuestra respuesta ante ellas sea diferente y logre beneficiarnos y aprender de esos momentos.